Sorprende no hallar inquina en su mirada. Nada en los ojos de Jeremy Scahill(Wisconsin, 1974) advierte de todo el mal que ha visto. En Somalia, en Irak, en Afganistán o Nigeria… en todas las matanzas de las que ha sido testigo a lo largo de su carrera como reportero y periodista de investigación. Hasta que entra en materia y el furor invade sus pupilas, un augurio de las terribles acusaciones que están por llegar, de las inconcebibles revelaciones sobre la política antiterrorista del Gobierno de EEUU.
Ganador del Premio George Polk Book (con Blackwater, el ascenso del ejército mercenario más poderoso del mundo) y colaborador de la revista The Nation y el programa Democracy Now!, Scahill estuvo la semana pasada en Madrid para presentar su última obra, Guerras Sucias, el mundo es un campo de batalla, un viaje al corazón de las operaciones encubiertas, a la política de asesinatos selectivos que practica Washington y su brazo ejecutor, el Mando Conjunto de Operaciones Especiales (JSOC, por sus siglas en inglés). Y un homenaje, también, a las víctimas invisibles de un conflicto que no conoce fronteras. Si su investigación tuviera que ser resumida en una frase, esta sería apropiada: las guerras encubiertas comenzaron mucho antes del 11-S, pero Barack Obama ha reemplazado la caza y captura de presuntos terroristas que ejerció la Administración Bush por el asesinato. 
El periodista Jeremy Scahill en Somalia, en una imagen del documental Guerras Sucias.
.- Pregunta: Antes de su investigación muy pocos conocían la existencia del JSOC, la unidad más secreta de la historia militar estadounidense; ¿cómo actúa el Mando Conjunto de Operaciones Especiales?   
.- Respuesta: En realidad, el JSOC es una fuerza paramilitar de la Casa Blanca que integran los mejores soldados de las fuerzas de EEUU. Tiene más flexibilidad que ninguna otra unidad en la historia. Hay órdenes secretas que demuestran que estos presidentes han decretado “operaciones quinéticas”, un término de la industria del asesinato. Por supuesto, no es el término que a la Casa Blanca le gusta emplear; prefieren llamarlo asesinato selectivo, acciones contra blancos de alto valor…. Se supone que el JSOC debería informar al Congreso (estadounidense), pero no hay ningún control sobre sus operaciones ni sobre sus miembros.
.- P: ¿Entonces quién es el responsable final de estos asesinatos, de estaguerra sucia? ¿Quién controla al JSOC, el presidente?
.- R: No importa quién sea el presidente, quién ocupe la Casa Blanca; en Irak el general McChrystal (antiguo comandante en jefe de la OTAN en Afganistán) controlaba el JSOC, que posteriormente estuvo bajo el control del general McRaven, el hombre que dirigió el ataque que acabó con Bin Laden.McRaven (en el centro de la fotografía) era un miembro original de los SEAL, pasó su carrera entera en operaciones especiales y ahora está al cargo de todas las operaciones encubiertas de EEUU.
El equipo de Obama sigue la operación que acabó con Bin Laden. En el centro de la imagen, el general McRaven (Reuters).
.- P: Sabemos que Washington lanza ese tipo de misiones en Afganistán, Somalia, Yemen y, más recientemente, Libia. Pero usted habla de cientos de países…
.- R: Hay una frase en la doctrina militar americana: “Preparación operacional de las zonas de batalla”. Es muy importante. Significa que si las fuerzas especiales creen que Estados Unidos puede tener un conflicto en un lugar del mundo, tienen permiso para enviar equipos especiales a cualquier parte. (…) Trabajan con las fuerzas locales en muchos lugares, como Filipinas, Colombia o México en la guerra contra el narcotráfico… en Oriente Medio están entrenando a fuerzas de otros países. Lo hacen para, en previsión de conflictos futuros, tener relación con mandos militares. Son los maestros de la guerra.      
.- P: Es decir, Obama ha extendido la guerra sucia que inició George W. Bush, ¿por qué? ¿Por qué las operaciones encubiertas estarían sustituyendo a las guerras convencionales?        
.- R: Cuando llegó al poder, Obama tenía muy pocos conocimientos de política exterior, no tenía experiencia militar, tan sólo llevaba dos años en el Senado. Cuando entró en la Casa Blanca, las cabezas de las seis agencias de Inteligencia pintaron un cuadro para el actual presidente de cientos, si no miles, de amenazas para los Estados Unidos. El mensaje fue: “Si no nos das más poder para emprender guerras preventivas contra el terrorismo, seremos golpeados de nuevo”.
El programa de caza y captura se convirtió en un programa de asesinato porque Obama no quería enviar más gente a Guantánamo. Estamos ante una nueva época marcada por el uso de mercenarios y corporaciones privadas, una época de más espionaje y apoyo a las milicias localesMcChrystal, (el general David) Petraeus, McRaven… fueron los artífices de este cambio. A la Administración le importaban más los asuntos domésticos, así que el camino quedó allanado. El programa de caza y captura se convirtió en un programa de asesinato porque Obama no quería enviar más gente a Guantánamo. Estamos ante un cambio, una nueva época marcada por el uso de mercenarios y corporaciones privadas, una época de más espionaje y apoyo a las milicias locales.
.- P: Sin duda, la crisis económica también jugó su papel en esta mutación…
.- R: Exacto. EEUU ha gastado un billón de dólares en las últimas guerras. Y lo increíble es que, en todos los comentarios que se hacen sobre las causas de la crisis, nunca se menciona la guerra. Las grandes operaciones como Irak o Afganistán son demasiado caras. Es mucho menos costoso utilizar equipos especiales. Además, con el programa de los drones no se arriesgan vidas americanas. Si miras Irak te darás cuenta de que hemos destruido el país. Los únicos que han ganado con esta guerra son las grandes corporaciones, como Halliburton, Lockheed Martin, etcétera. Los ciudadanos de EEUU no se han beneficiado, los europeos no se han beneficiado.
.- P: Ahora que menciona las grandes corporaciones, usted suele decir que controlan los medios de comunicación estadounidenses.
.- R: Tenemos una cultura de medios que está absolutamente bajo el dominio de las corporaciones, cuyo objetivo es hacer dinero, no proporcionar información al público. La prensa sólo es libre cuando eres el dueño. ¿Y quién es el dueño? Las corporaciones. Los fabricantes de cereales, de refrescos no quieren que sus anuncios sean emitidos después de imágenes de guerra, de la fotografía de una niña desmembrada. Quieren la última aventura sexual de Britney Spears, quieren asuntos pop. Otro ejemplo de la manipulación: hay cadenas y medios que tienen generales retirados en nómina, actúan como analistas independientes, pero no lo son. Están en todas las cadenas opinando sobre conflictos, amenazas y temas internacionales. Incluso en la NBC, el canal privado de Obama.  
.- P: ¿Es efectiva esta guerra sucia¿Acabará algún día con el terrorismo yihadista?
.- R: Obama ha aceptado la estrategia de que EEUU puede llegar a la victoria a través del asesinato. Pero la política de seguridad norteamericana está dañando la propia seguridad del país. Hemos llegado a un punto en el que estamos creando más enemigos que el número de terroristas que estamos matando. Es un precedente muy peligroso, porque ¿quién podría decirle a China que no mate disidentes? ¿O a Rusia que no masacre a los chechenos? EEUU se niega a reconocer la ley internacional a no ser que entre en sus intereses. En ningún tema se ve más claro esto que en la política antiterrorista.
.- P: Y sin embargo Obama, premio Nobel de la Paz, ha logrado difundir la imagen de un presidente pacifista, de líder opuesto a su belicoso predecesor.
.- R: Nadie va a ser votado como presidente de EEUU si no cree que Estados Unidos tiene el derecho de usar las operaciones especiales para defender recursos naturales o la seguridad del país. Una de las cosas más peligrosas de Obama es que ha proyectado un mensaje de que hay un cambio con la era Bush. No es cierto. Es como una botella de vino nueva, pero el vino es viejo. 
*Guerras sucias, el mundo es un campo de batalla, de Ediciones Paidós, sale hoy a la venta en España.